Amar tan pronto nunca había sido una necesidad como cultivar una profunda espontaneidad
Después de todo he aprendido y he sabido contigo
Tú, de presencia mística y mirada profunda
Yo, existiendo con goteras en el alma
De lo que fuimos ya no queda nada salvo la experiencia de haber estado enamorada
Pero no te preocupes por mi que gracias a ti descubrí mi infinito potencial de dar y recibir amor
Solo me queda resanar las goteras y el gran hueco que tu partida dejo, entregarme una vez más a lo desconocido y aceptar la realidad aquella en la que ya no existes más
